Todas las mujeres a las que se ha diagnosticado Cáncer de Mama y se les ha realizado un tratamiento tienen que continuar controlándose periódicamente con el médico tratante.
Cuando una mujer recibe el diagnóstico de Cáncer de Mama y luego es tratada, es muy frecuente que sienta incertidumbre ante el futuro. Puede preguntarse sobre los pasos a seguir, cada cuánto acudir al médico, ante qué síntomas consultar, y otras tantas interrogantes.
Por otra parte, los estados de ánimo varían en cada persona, pero al igual que durante los tratamientos, en algún momento puedes sentirte: ansiosa, deprimida o triste, asustada, enojada, frustrada, débil o vulnerable.
También la situación por la que estás pasando puede causarte estrés.
Hay varias actividades que pueden ayudarte a manejar esos sentimientos:
• Relajarte.
• Hacer ejercicio.
• Buscar el apoyo de la familia y amigos.
• Unirte a un grupo de apoyo.
• Consultar a tu médico que te podrá derivar a un psicólogo.
